El Real Betis empató a 0 ante el Genk en un partido en el que los béticos apenas generaron oportunidades de gol y en el que recordó al Betis de la fase de liga de la pasada Conference League. Lo mejor del partido, sin ninguna duda, fue el rugido de nuestra afición en Europa tras el castigo impuesto por la UEFA en la Jornada 2. Los béticos se hicieron notar una vez más y, como siempre, convirtieron el campo rival en ‘casa’, jugando un nuevo partido de ‘local’.

El partido empezaba de forma pareja, sin muchas complicaciones para el cuadro verdiblanco ni para el cuadro local, ya que en la primera mitad apenas presenciamos llegadas de ambos equipos. La mejor ocasión del Real Betis fue un pase a la espalda de la defensa que puso Antony a Riquelme, aunque este no pudo culminar la jugada. Nos íbamos al descanso del partido y llegaba el primer cambio. Tras la reanudación, Pablo García sustituía a un Antony que no tuvo su mejor noche y que además arrastraba una amarilla, por lo que Pellegrini no quiso arriesgar, pensando también en el próximo duelo europeo en casa ante el Lyon.

La segunda parte no cambio mucho y es que para el espectador se podría calificar como un partido algo aburrido. Las mejores ocasiones del partido y del segundo tiempo las tuvieron los locales: la primera la repelió Álvaro Valles con una tremenda mano abajo, y la segunda y más clara del partido la tuvo el delantero surcoreano Oh, un tiro que afortunadamente se estrelló contra el palo.

Por destacar a algún jugador, me dejó muy buenas sensaciones la pareja Bartra-Valentín. También estuvo bien Deossa, que volvía tras varios partidos sin jugar y lo hizo con conjuntivitis, según comenta Álvaro Borrego. El punto negativo, a mi juicio, fueron Riquelme, que continúa sin encontrar su sitio ni su chispa en el Real Betis, y Lo Celso, que pasó totalmente desapercibido en la mayoría del partido.

El Betis, además, perdió la oportunidad de firmar una racha histórica de goles marcados consecutivamente. Eso sí, el conjunto verdiblanco únicamente ha perdido 4 de los últimos 33 partidos: ¡una absoluta barbaridad que ensalza el gran momento de nuestro Real Betis!

Ahora, todos juntos, a afrontar el ilusionante partido ante el Atlético de Madrid, en nuestra casa, con nuestra gente y en un momento espectacular. ¡El Villamarín debe ser una caldera! Todos juntos, ¡Vamos Betis!